El texto “contra la pandemia” hecho en nombre de PI, (aqui) se fundamenta en las concesiones más vulgares a las campañas del capital (pandemia, virus…) y oculta lo esencial del ataque económico/social del valor contra los seres humanos: despotismo del valor sobre la vida, tiranía de lo financiero y bancarización subsumiendo todos los polos de la existencia humana, aumento de la tasa de explotación y de la tasa de ganancia con emisión monetaria, confinamiento, subsunción de lo humano en el dinero digital. La misma paralización productiva, con el pretexto de la pandemia, es clave en esa subsunción y la consecuente afirmación de la oligarquía bancaria mundial.
+ Al decir que el Estado utiliza la pandemia del coronavirus, SE ESTÁ aceptando el invento (explotador y contra insurreccional) que la pandemia existe y luego el Estado la utiliza. Cuando en realidad la pandemia misma no existe (¡ni siquiera los científicos y virólogos más encumbrados aceptan hablar de pandemia!), SINO QUE es un artificio del capital (inflado por el espectáculo) para aumentar la tasa de explotación y de ganancia, para bancarizar, para imponer la subsunción de la vida humana en lo financiero y bancario.
+ Se oculta que la clave del ataque es el famoso reset – el reinicio -- (¡qué venimos anunciando desde hace años!) de todas las relaciones humanas y de la relación entre los seres humanos y los medios de satisfacerlas, para introducir en todos los poros: lo financiero. Para que todas las relaciones entre los humanos (y entre los humanos y los medios de vida) queden totalmente sometidas al dinero digital fabricado incansablemente por los bancos.
Es el nivel supremo de la tiranía del dinero contra la comunidad humana de la subsunción de la vida en el valor valorizándose. ¡Y esa que es la cara “económica” del confinamiento generalizado se calla en el texto! Eso que es lo más crucial como enajenación humana (campo de concentración) ¡ni se menciona!
+ Se oculta que dicho ataque es el proceso mismo, de la FINANCIARIZACIÓN del mundo, que limita toda la producción de los medios de vida (y de la misma reproducción humana), afirmando la producción de valor en base a dinero falso, lo que implica concomitantemente una reducción de la producción y plusvalía industrial y una supercompensación en base a la fortificación de la oligarquía financiera y el aumento de su plusvalía obtenida por tributos, tasas e impuestos…, como hace más de 500 años. Ello es una prueba adicional de la invarianza histórica del valor y la explotación humana y deja en evidencia la falsedad de la teoría del “valor trabajo” y desmistifica la mitología del trabajo como valor humano.
+ El texto “Contra la pandemia”… toma como realidad el espectáculo creado por los centros estratégicos de inteligencia militar y de propaganda del Estado mundial, diseñado por el gobierno en las sombras de la aristocracia mundial. A partir, de tan tremenda concesión al poder, de aceptar la mentira de 1) que existe realmente una pandemia 2) que la misma es creada por el virus,
NO PUEDE EXISTIR UNA REAL CONTRAPOSICIÓN REVOLUCIONARIA DE CLASE
+ La pandemia no es más que una CONSTRUCCIÓN IDEOLÓGICA de lo FINANCIERO contra la vida humana (¡en sentido mucho más amplio que lo que el poder del dinero llama “salud”!) preparada meticulosamente en los órganos y servicios secretos internacionales; diseñado y testeado por los centros ocultos del poder de la bancocracia mundial desde hace mucho tiempo.
+ Se oculta que la campaña coronavirus, al liquidar una parte importante de la producción y el capital productivo y “compensarlo” con impresión de billetes falsos en beneficio de la bancocracia mundial:
* Aumenta el valor del capital total (exactamente en todo lo valorizado del dinero falso) y aumenta la tasa de explotación: en el texto todo se presenta como “catástrofe” y no como operación enormemente beneficios para el capital bancario.
* Contrarresta la llamada “tendencia decreciente de la tasa de ganancia” liquidando sectores enteros de la economía productiva (asegurando la eliminación de todo lo que no habían hecho las recesiones pasadas en eliminación de lo no rentable) y disocia definitivamente el descenso efectivo de la tasa de ganancia productiva del capital al aumentar simultáneamente la tasa de ganancia financiera. (¡Lo que hasta el cuento de la pandemia se hacía a nivel de las grandes empresas de algunos países… cerrando empresas y comprando sus propias acciones, ahora se impone para el mundo entero!)
* Concentra y centraliza el capital total mundial en una fracción cada vez más pequeña de la aristocracia financiera internacional, transformando a todas las otras en súbditas de la bancocracia (incluyendo los gobiernos de todos los países que no tienen producción propia de dinero fiat)
* Expropia y condena a muerte a partes enteras del proletariado…, lo que también es un objetivo central del ataque contra los seres vivos y reubica la totalidad del ataque en los proyectos a largo plazo de “salvar al planeta” sacrificando en calidad y cantidad la vida humana. Todos los centros ocultos del poder mundial sostienen desde siempre (¡en general desde su origen, algunas veces hace muchos siglos!) la necesidad de reducir la población del planeta. Es el fundamento mismo de la necesidad del genocidio selectivo tan idealizado en los proyectos de la bancocracia mundial.
Se ocultan la dinámica y los verdaderos objetivos económicos, sociales y políticos del ataque del valor contra todas las especies vivas, del ataque de lo financiero contra lo humano, de la dictadura del dinero contra la vida de la especie, de la subsunción financiera del mundo vivo. Quien realiza el ataque no es el virus, ni mucho menos una pandemia, sino la dictadura del dinero, operando como hemos denunciado siempre contra la actividad humana reproductiva.
Incluso el título deja la total ambigüedad sobre la pandemia: no basta con decir que la pandemia es del capital, porque en el capitalismo todo es del capital y por lo tanto se está siendo cómplice del MITO de la pandemia como si tuviese una existencia real y no una mera existencia ideológico espectacular. ¡Eso mismo, hace al texto, cómplice de la ciencia y la OMS!
El aumento de la explotación y opresión es una operación conjunta de la bancocracia mundial. La paralización de TODA la actividad humana global, de las relaciones humanas es un acto deliberado, consciente y planificado por los aparatos estatales, militares, políticos, sindicales…del Estado mundial digitados por la aristocracia en sus clubes y foros semi secretos (Club de Roma, Davos, Bilderberg…)
Desde ese punto de vista de fracción dominante a nivel mundial, no existe ningún exceso de “capital ficticio’ (lo que deja en ridículo toda la payada laborista, objetivista y catastrofista sobre el mismo que aparece en el texto) sino pura ganancia constante y sonante creada de un saque y embolsada como acumulación capitalista.
Nunca los más ricos se siguieron haciendo más ricos más rápido. Y como si fuera poco, con la luminosa perspectiva que todo el trabajo informal y precario mundial, que antes escapaba a la subsunción bancaria, al ser paralizado por el confinamiento será sometido en el futuro.
La CUANTITATIVAMENTE NUEVA subsunción bancaria “postcrisis” está asegurada por la obligatoriedad de pedir créditos para “volver a empezar” (las líneas de crédito ya han sido anunciadas en todos los bancos del mundo) y por la bancarización totalmente obligatoria que la oligarquía bancaria ya ha establecido para esos mismos créditos: todo será digital, todo será de plástico y virtual.
¡Es la profundización cualitativa de la tiranía de la oligarquía bancaria sobre el planeta entero, según el plan establecido por los Bilderberg!
La paralización y represión de todas las actividades humanas, reproductivas, corporales, intelectuales, físicas, sexuales, deportivas, artísticas, turísticas…, tiene por objeto separar aún más los seres humanos de los medios para satisfacer sus necesidades e imponer el despotismo del dinero y los bancos en todos los poros de las mismas. La FINANCIARIZACIÓN y bancarización de todas esas actividades de sobrevivencia y vida, de necesidades y placeres, de comunidad humana y compenetración vivencial, conduce al despotismo total del valor sobre la vida de la especie.
Desde su concepción a la reorganización social “postpandemia” todo está previsto para una mayor bancarización de todas las actividades humanas. ¡Y no solo el intercambio de “bienes y servicios” (como dicen los economistas), sino que toda la vida se proyecta como mediada por el celular, el banco, el tributo, la tasa y el impuesto! ¡Como denuncian los proletarios en Medio Oriente, como denuncian los chalecos amarillos en todas partes!
Es evidente que el texto retoma muchas cosas de nuestro programa revolucionario, muchas fórmulas históricas de la contradicción capitalismo contra humanidad, valor contra lo vivo y en ese sentido no tenemos nada que agregar. Las formulaciones son las clásicas y punto.
En cambio lo COYUNTURAL, lo ESPECÍFICO sobre la ACTUALIDAD, lo que llama “la pandemia”…nos parece que OCULTA MÁS DE LO QUE REVELA, que acepta más las mentiras impuestas por los Bilderberg (¡que ellos no son responsables de nada!, ¡que ellos no son un gobierno en las sombras! ¡Que ellos no hacen construcciones ideológicas y militares sobre las pandemias!
¡Que la pandemia es una realidad! ),… pero vemos, que la realidad social es el ATAQUE DE LA HUMANIDAD por la tiranía abierta de la bancocracia mundial.
En ese sentido, nos parece que el texto no solo no aporta nada, sino que parte de concesiones decisivas al PODER, al ESPECTÁCULO, a la CIENCIA… que termina haciéndose funcional al CAPITAL y al ESTADO.
En efecto, no es suficiente con denunciar la represión del capital y el Estado hoy…para situarse del lado de la lucha proletaria contra todo eso.
Basta con admitir LO FALSO, como la PANDEMIA como si fuese una realidad (¡cómo si por ejemplo se hubiese confirmado que el coronavirus mata más que una gripe cualquiera!) para ser totalmente ambiguos (centristas en términos políticos)… y terminar “acusando” al Estado de no haber actuado lo suficientemente rápido por intereses económicos (defensa de la producción material) como hace el sindicalismo, la izquierda burguesa o el grupo Barbaria.
Pero incluso si se es claro sobre esto y se DENUNCIA todo el confinamiento como medida represiva…, se puede ser cómplice de la oligarquía financiera, el capital, el Estado si no se dice QUE ES EL CONFINAMIENTO MISMO y LA MEDICINA que AGRAVAN LA SALUD DE TODA LA HUMANIDAD.
Si no se denuncia el estrés oxidativo, las vacunas y otras causas iatrógenas de las enfermedades, el choque emocional de los controles y el poder policial y militar en todas partes…la denuncia del confinamiento y la propia represión Estatal resulta pobre y falluta.
La articulación entre los aspectos “salud”, “confinamiento”, intereses del capital y el Estado, REPRESIÓN Y MILITARIZACIÓN, gobierno en las sombras diseñando planes de control y eliminación de la producción material y la población…resulta pobre y políticamente centrista.
Es precisamente por esa falta de articulación real, que todo el asunto del texto que criticamos resulte tan chaucha, tan socialdemócrata.
La denuncia del “capital y el Estado represivo” es floja y centrista si no se GRITA CLARAMENTE QUE TODA LA POLÍTICA DE SALUD contra el CORONAVIRUS, no solo no es contra el coronavirus, no solo no busca salir de una pandemia imaginaria SINO QUE MATA Y NO CURA; destruye mucho más a los seres humanos que lo que se supone que debiera combatir al virus, a los enfermos.
ES IMPRESCINDIBLE (y no una opción entre otras) DENUNCIAR A LA MEDICINA MISMA, a todo el aparato de SALUD…, a la concepción misma de que los VIRUS CAUSAN LAS PANDEMIAS, a la mentira DE QUE ESTO ES UNA PANDEMIA…, a que la solución es UNA VACUNA…y QUE ES POR ESO QUE SE JUSTIFICA EL confinamiento.
Es ahí donde la denuncia del “capital y el Estado” tiene que denunciar NECESARIAMENTE a la medicina, a las medidas de confinamiento, a las medidas de reclusión, de separación humana, de represión corporal y sexual…de ser la principal causa de DESTRUCCIÓN DE LA SALUD HUMANA.
Si, no se procede de esta manera y al mismo tiempo se desconoce que todas estas campañas son diseñadas y estructuradas por el gobierno en las sombras de la bancocracia mundial, se corre el riesgo de servir al confinamiento mismo.
Para nosotros es imprescindible DENUNCIAR A LA CIENCIA Y la medicina MISMA como la RESPONSABLE DE LAS MUERTES Y LAS ENFERMEDADES…y más que eso: del sometimiento religioso al miedo al virus y a la muerte…
El sometimiento de los humanos a la ciencia y a la aristocracia bancaria implica convencerlo de que ES UN ENFERMO EN POTENCIA…, que la muerte lo acecha como el diablo al creyente.
Para nosotros es determinante esencial de una denuncia revolucionaria el situar a la medicina y a la “industria” química como parte del PODER MUNDIAL del monstruo de tres cabezas del que hablaba Ricardo Flores Magón…. E inscribir todos sus actos y proyectos actuales como resultado unificado de la FINANCIARIZACIÓN del mundo, de la subsunción humana al dinero fiat digitalizado, del sometimiento de los seres humanos a la enfermedad y la vacunación en permanencia (todos somos pecadores y por lo tanto enfermos, todos debemos vacunarnos, todos debemos ser controlados…), a la obligatoriedad del chip para todos, al control ciudadano y militar generalizado… ¿saldremos de la pandemia con obligación vacinal `por unanimidad….o será exigible para pasar una frontera nacional?
Con las concesiones ideológicas que contiene el texto de la pandemia…, no vamos a ningún lado… y los llamados piadosos a la “revolución mundial” aparecen como el anzuelo social democrático del programa máximo si no se DENUNCIA el mito del virus que enferma, el mito de la pandemia que mata…y se calla que quien mata y enferma es la separación humana, la falta de cariño y amor corporal, la separación, el encierro…el confinamiento…
FIRMADO: “PUTAPARIÓ”
(Estructuras varias del Este y el Oeste)